A Shiva, el destructor, se lo representa como un hombre de familia, como a un hombre sagrado con cabello enmarañado y el cuerpo cubierto de cenizas; como Bhuteswara, señor del los espíritus, con un collar de calaveras; y como en este caso, como señor del Tandava, la danza universal en la que baila la creación y destrucción del mundo, pisoteando al enano de la ignorancia humana. Mediante el feroz poder de su danza, Shiva revela la verdad cósmica. Danza en un círculo de llamas, llevanod en una mano la llama de la destrucción y en la otra el tambor de la creación.
Los hombres santos que lo vieron bailar aclamaron:
A Shiva, el destructor, se lo representa como un hombre de familia, como a un hombre sagrado con cabello enmarañado y el cuerpo cubierto de cenizas; como Bhuteswara, señor del los espíritus, con un collar de calaveras; y como en este caso, como señor del Tandava, la danza universal en la que baila la creación y destrucción del mundo, pisoteando al enano de la ignorancia humana. Mediante el feroz poder de su danza, Shiva revela la verdad cósmica. Danza en un círculo de llamas, llevanod en una mano la llama de la destrucción y en la otra el tambor de la creación.
ResponderEliminarLos hombres santos que lo vieron bailar aclamaron:
"¡Te contemplamos danzar,
fuente del mundo,
te tenemos en nuestros corazones!"
Por ti giera esta rueda de Brahama.
Tú, único guardián del mundo,
estás lleno de Maya.
Nos refugiamos en tí.
Te adoramos.
Eres el alma de Yoga,
señor de las conciencias,
que bailas la danza divina."