En los últimos años, los aviadores militares se encontraron con frecuencia con objetos misteriosos en el espacio aéreo de entrenamiento estrictamente controlado. Según relatos de testigos oculares y datos de sensores filtrados, la nave parecía exhibir una dinámica de vuelo que doblaba, si no rompía, las leyes de la física. En los incidentes más notables, los objetos parecían maniobrar y moverse por el aire sin alas ni medios perceptibles de propulsión.
Los años transcurridos desde que estos encuentros se hicieron públicos han visto numerosos desarrollos que deberían impulsarnos a tomarnos en serio a los ovnis.
1. Los pilotos militares y otros miembros del servicio reportaron más de 500 incidentes OVNI adicionales. Algunos parecían demostrar tecnología muy avanzada.
En 2019, el intenso interés del Congreso llevó a la Marina de los EE. UU. a instituir un mecanismo formal de informes de ovnis. Desde entonces, los aviadores y otros miembros del servicio han informado de la asombrosa cantidad de 510 encuentros con ovnis (incluidos algunos incidentes históricos que datan de 1996).
De los 366 encuentros con ovnis informados recientemente, aproximadamente la mitad permanece sin identificar. Una evaluación previa identificó solo uno de los 144 informes de ovnis. A pesar de que muchos de los objetos misteriosos se registran en múltiples sistemas de sensores sofisticados (como satélites espías, radares y videos infrarrojos), la mayoría de los 510 informes militares de ovnis permanecen sin identificar.
Según los analistas de inteligencia, algunos de los objetos parecen demostrar "características de vuelo o capacidades de rendimiento inusuales". Tales casos, según el gobierno de los EE. UU., “requieren un análisis más profundo”. Además, "algunos OVNIs parecían permanecer estacionarios en vientos en altura, moverse contra el viento, maniobrar abruptamente o moverse a una velocidad considerable, sin medios perceptibles de propulsión".
A pesar de las fuertes redacciones, los informes de ovnis desclasificados dejan en claro que los pilotos de combate con frecuencia quedan atónitos y exasperados por tales encuentros.
Curiosamente, los funcionarios confían mucho en que los objetos observados por los aviadores militares en los últimos años no son aeronaves o tecnología secreta del gobierno de los EE. UU. Al mismo tiempo, los analistas no tienen evidencia de que los encuentros “sean indicativos de un gran avance tecnológico por parte de un adversario potencial” como China o Rusia.
2. El Congreso se está tomando muy en serio los ovnis.
Gracias a las sesiones informativas en persona de los aviadores militares que se encontraron personalmente con los ovnis, los miembros del Congreso se están tomando el fenómeno con extrema seriedad.
En diciembre, el presidente Biden promulgó la Ley de Autorización de Defensa Nacional (NDAA) de 2023, que incluye amplias disposiciones sobre ovnis, y se convirtió en ley. Más allá de reforzar una nueva y poderosa oficina OVNI, la legislación redefine "OVNI" como "fenómenos anómalos no identificados" (UAP) para dar cuenta de los objetos desconocidos observados en (y moviéndose entre) el aire, el agua y el espacio. Además, la nueva ley ordena al Departamento de Defensa que establezca un mecanismo seguro para que las personas afiliadas al gobierno reporten información relacionada con UAP. La legislación parece destinada, en parte, a llegar al fondo de los rumores de larga data de que los programas de análisis de ovnis "heredados" pueden haber sido ilegalmente retenidos del Congreso.
Curiosamente, la NDAA de 2023 también exige una contabilidad amplia (que se remonta a 1945) de la participación del gobierno de los EE. UU. en el fenómeno OVNI. Entre otros requisitos, el Pentágono y las agencias de inteligencia deben aclarar “cualquier esfuerzo para ofuscar, manipular la opinión pública, ocultar o proporcionar información incorrecta no clasificada o clasificada sobre” UAP.
La legislación anterior también requiere que la oficina OVNI recientemente establecida: (1) proporcione informes, análisis y sesiones informativas frecuentes sobre la actividad OVNI, incluidos los vínculos con la tecnología nuclear y los posibles efectos en la salud asociados con los encuentros con UAP, al Congreso y al público, (2) desarrollar un "plan científico" detallado para dar cuenta de los ovnis "que superan el estado del arte conocido en ciencia y tecnología" y (3) montar "investigaciones de campo rápidas de incidentes [OVNI]".
Importante destacar que el Congreso le dio al director de la oficina de ovnis autoridades de barrido para aprovechar "cualquier recurso, capacidad, activo o proceso del Departamento [de Defensa] y la comunidad de inteligencia". Al mismo tiempo, el Congreso se aseguró de que el director de la oficina de ovnis ahora informe directamente a los principales líderes del Pentágono, eliminando varias capas de probable obstrucción burocrática.
3. Los funcionarios del gobierno están haciendo declaraciones sorprendentes sobre los ovnis.
Altos funcionarios de inteligencia (como el ex director de inteligencia nacional John Ratcliffe, los ex directores de la CIA John Brennan y James Woolsey y la actual directora de inteligencia nacional Avril Haines) han hecho comentarios sorprendentes sobre UAP. Lo mismo ocurre con el exastronauta, senador y actual administrador de la NASA, Bill Nelson.
Para no quedarse atrás, los expresidentes Barack Obama y Bill Clinton dieron respuestas sorprendentes cuando se les preguntó acerca de los ovnis en los últimos años (al igual que varios miembros del Congreso, especialmente aquellos con asignaciones en comités de inteligencia).TraduccionMaEl-BLV