¿Qué pasaría si un día despertamos dándonos cuenta
de que somos mayoría?
¿Qué pasaría si de pronto una injusticia, solo una, es repudiada por todos, todos que somos todos, no unos, no algunos, sino todos?
¿Qué pasaría si en vez de seguir divididos nos
multiplicamos, nos sumamos y restamos al enemigo que interrumpe nuestro
paso?
¿Qué pasaría si nos organizáramos y al mismo tiempo
enfrentáramos sin armas, en silencio, en multitudes, en millones de miradas la
cara de los opresores, sin vivas, sin aplausos, sin sonrisas, sin palmadas en
los hombros, sin cánticos partidistas, sin cánticos?
¿Qué pasaría si yo pidiese por vos que estás tan
lejos, y vos por mí que estoy tan lejos, y ambos por los otros que están muy
lejos y los otros por nosotros aunque estemos lejos?
¿Qué pasaría si el grito de un continente fuese el
grito de todos los continentes?
¿Qué pasaría si pusiésemos el cuerpo en vez de
lamentarnos?
¿Qué pasaría si rompemos las fronteras y avanzamos, y avanzamos, y avanzamos, y avanzamos?
¿Qué pasaría si quemamos todas las banderas para tener solo una, la nuestra, la de todos, o mejor ninguna porque no la necesitamos?
¿Qué pasaría si de pronto dejamos de ser patriotas
para ser humanos?
¿No sé… me pregunto yo, qué pasaría?
Mario Benedetti