Investigadores de la Universidad de Yale están trabajando en una nueva forma de vacunar a humanos mediante aerosoles, sin necesidad de aguja ni jeringa.
La afirmación es que ya se ha desarrollado el llamado "Air Vax", que permite a los científicos locos administrar ARNm en el cuerpo de las personas a través de los pulmones en lugar de mediante los brazos.
El ARNm de Air Vax está encapsulado en nanopartículas de polímero que, tras un estudio en ratones, llevaron a los investigadores a declarar que este "nuevo método de administración podría 'cambiar radicalmente la forma en que se vacuna a las personas'".
En áreas remotas del mundo, así como en personas que temen a las agujas, Air Vax puede hacer el trabajo sin aguja ni jeringa, lo que permite una mayor cobertura de vacunación.
"La capacidad de entregar eficientemente ARNm al pulmón tendría aplicaciones para el desarrollo de vacunas, terapia génica y más", explica el artículo, y agrega "que dicha entrega de ARNm puede lograrse encapsulando ARNm de interés dentro de poli(amina-co- éster) poliplexes [nanopartículas]".
¿Pronto bombardearán el mundo con estelas químicas de ARNm?
El fisiólogo celular y molecular Mark Saltzman dirigió la investigación, que muchos temen que permitirá la fumigación aérea de vacunas en poblaciones sin su consentimiento.
Mientras que el método tradicional de aguja y jeringa requiere que una persona se arremangue y se pinche, las vacunas de ARNm en aerosol pueden simplemente rociarse a voluntad. Cualquiera que esté cerca lo inhalará, posiblemente sin saberlo.
En el estudio con ratones, los roedores recibieron dos dosis intranasales de nanopartículas que transportaban poliplexes de ARNm del coronavirus de Wuhan (COVID-19), también conocido como PACE, que se describe como "un polímero biocompatible y altamente personalizable".
Saltzman había dirigido previamente un estudio que utilizaba un sistema de "cebado y pico" para administrar inyecciones de COVID: el tipo realmente quiere que las personas reciban inyecciones de COVID o las respiren. Ese método implica tanto una inyección como un aerosol de proteínas de pico en la nariz.
En su último estudio, Saltzman determinó que tal vez la porción de inyección sea innecesaria si, en cambio, se pueden lanzar suficientes nanopartículas cargadas de púas en la cavidad nasal de una persona, para "protegerla" del COVID, por supuesto.
"En el nuevo informe no hay ninguna inyección intramuscular", alardeó Saltzman. "Simplemente administramos dos dosis, una primaria y una de refuerzo, por vía intranasal, y obtuvimos una respuesta inmune altamente protectora".
"Pero también demostramos que, en general, se pueden administrar diferentes tipos de ARNm. Por lo tanto, no solo es bueno para una vacuna, sino que también es potencialmente bueno para la terapia de reemplazo genético en enfermedades como la fibrosis quística y la edición genética... Usamos un ejemplo de vacuna demostrar que funciona, pero abre la puerta a realizar todos estos otros tipos de intervenciones".
Si se aprueba el invento de Saltzman, y lo más probable es que lo sea, ¿por qué no? De todos modos, a nadie parece importarle; entonces no está descartado que algún día pronto veamos estelas químicas llenas de nanopartículas de ARNm y proteínas de pico lanzadas desde aviones sobre ciudades enteras.
Este método permitiría la vacunación masiva de la población sin tener que inyectar individualmente a todas y cada una de las personas. Es el mismo tipo de "nanovacuna" oral que ahora se utiliza en camarones y otros mariscos y carnes para vacunarlos contra el COVID.
Los Saltzman del mundo están empeñados en pinchar y rociar a todos con ARNm de COVID y proteínas de pico porque afirman que esto evitará que el virus chino enferme a nadie más.
"Cuando se juntan las piezas del rompecabezas, surge una imagen inquietante", advierte el Dr. Joseph Mercola sobre hacia dónde se dirige todo esto.
Una vez que las vacunas lleguen al aire, no habrá forma de escapar de ellas.
FUENTEMaEl: 3Oct-2023 NaturalNews
