Hay cerca de 3.000 policías y 2.000 soldados en las áreas afectadas para dar asistencia médica, comida y agua a las comunidades damnificadas.
Además, los equipos de rescate están tratando de buscar a más personas entre los escombros.
El presidente guatemalteco, Otto Pérez Molina, explicó que la mayoría de las muertes -39- se produjeron en la región de San Marcos, cercana al epicentro del temblor, mientras que diez personas fallecieron en Quetzaltengo y una en Sololá.
El sismo de magnitud 7,4 en la escala de Richter que golpeó la costa pacífica del país dejó además cuantiosos daños en viviendas e infraestructuras en esas regiones y también se pudo sentir en México.
FUENTEMaEl: 7Nov-2012 Noticias
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