El sol ha lanzado dos enormes llamaradas solares, lo que provocó temores de que podrían afectar las comunicaciones globales en un momento en que los satélites se necesitan desesperadamente.
A medida que el huracán Irma se desplaza hacia los Estados Unidos, devastando las islas del Caribe a lo largo del camino, la gente de la NASA y los meteorólogos estarán confiando en los satélites para mantenerse al día con la poderosa tormenta.
Sin embargo, las dos llamaradas solares - la más fuerte en 12 años - podría poner en peligro la comunicación por satélite.
Las tormentas solares explotan la radiación en todas las direcciones del sol, algunas de las cuales golpean la atmósfera exterior de la Tierra, haciendo que se caliente y se expanda.
Esto significa que las señales de satélite tendrían dificultades para penetrar en la atmósfera hinchada, lo que conduce a una falta de servicio de Internet, navegación GPS, televisión por satélite como Sky y señal de teléfono móvil.
La NASA dijo en un comunicado: "La radiación nociva de una llamarada no puede atravesar la atmósfera de la Tierra para afectar físicamente a los humanos en el suelo, sin embargo, cuando son suficientemente intensas, pueden alterar la atmósfera en la capa donde viajan las señales de GPS y comunicaciones".
Sin embargo, Terry Onsager, físico del Centro de Predicción del Clima Espacial de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA), se movió para calmar los temores sobre los satélites, específicamente los que han sido usados para ayudar a rastrear el huracán Irma.
Le dijo a Live Science: "Los satélites están diseñados específicamente para tener en cuenta este tipo de eventos".
Curiosamente, las poderosas llamaradas vienen justo cuando el sol se mueve hacia un período de baja actividad.
El sol sigue ciclos de aproximadamente 11 años donde alcanza un máximo solar y luego un mínimo solar - a lo que nuestra estrella se dirige.
En el primero, el Sol emite más calor, y menos en el segundo.
Nasa añadió: "El ciclo solar actual comenzó en diciembre de 2008, y ahora está disminuyendo en intensidad y se dirige hacia el mínimo solar.
"Esta es una fase en que estas erupciones en el sol son cada vez más raras, pero la historia ha demostrado que pueden ser intensas".TraduccionMaEl-BLV
FUENTEMaEl. 7Sept-2017 express.co.uk
