Hace un par de noches, me preguntaron por mi opinión sobre el enormemente controvertido Proyecto Blue Beam. Si no lo sabes, sigue leyendo. Dentro del campo de la teoría de la conspiración, hay pocas controversias mayores que el Proyecto Blue Beam. Supuestamente, es la creación de un grupo secreto de figuras poderosas, entre muchos otros, la NASA, las Naciones Unidas, los Bilderberger, la Comisión Trilateral y el Vaticano. El Proyecto Blue Beam, según cuenta la historia, estará a la vanguardia de un programa para crear una nueva sociedad dominada por la ley marcial y un gobierno mundial despiadado. ¿Y cómo podría surgir un gobierno así? Fingiendo la segunda venida de Jesucristo, específicamente mediante el uso de tecnología sofisticada de tipo holograma para proyectar grandes imágenes del Hijo de Dios en los cielos de los Estados Unidos, Canadá, Australia y gran parte de Europa. Otras partes del mundo verán imágenes masivas de Buda, de Alá, de Krishna, de Mahoma y de muchos otros dioses, dependiendo de las regiones, las personas y sus culturas, y las creencias de las naciones relevantes.
Sin embargo, en solo unos días, todas y cada una de esas imágenes se fusionarán en una imagen mucho más siniestra y aterradora: la del Anticristo, que informará a la gente de la Tierra que ni una sola de las religiones del mundo tiene la versió correcta de los eventos. Solo la de esta entidad de pesadilla es la versión precisa. Como resultado, se espera que toda la raza humana se doblegue y adore al Anticristo. Tal cosa dará como resultado el caos, el desorden y la anarquía en todo el mundo, que las personas detrás del Proyecto Blue Beam conocen astutamente demasiado bien. Con el mundo sumido en estados de miedo y caos, esta tremenda artimaña permitirá a las Naciones Unidas coordinar un programa en todo el planeta para esclavizar a toda la población de la Tierra. La historia es tan fantástica como aterradora. Pero es verdad?
La fuente de la historia del Proyecto Blue Beam fue Serge Monast, periodista de Montreal, Quebec, Canadá. Aunque Monast comenzó su carrera en el periodismo regular, en 1994, se centró casi exclusivamente en teorías de conspiración, incluyendo asuntos relativos a las teorías de conspiración de base masónica y asuntos relativos al escenario de un gobierno mundial. MaEl-BLV Fue en este momento que Monast afirmó haber descubierto cantidades masivas de información secreta en el Proyecto Blue Beam, y cómo se utilizaría para esclavizar a todos menos a la élite mencionada anteriormente. El hecho de que Monast muriera en diciembre de 1996, de un ataque al corazón, y a la edad de solo cincuenta y un años, ha generado sospechas en los reinos impulsados por la conspiración de que fue asesinado por agentes de este peligroso programa. La razón: para evitar que Monast haga sonar el silbato, a lo grande, en el proyecto.
La historia ha provocado numerosas preguntas: ¿Nuestros dioses están a punto de ser presentados ante nosotros, pero de una manera que pocos apenas podrían imaginar? ¿Existe realmente una tecnología holográfica tan sofisticada? ¿Podría una artimaña tan increíble engañar a toda la raza humana? ¿Cuáles son los objetivos a largo plazo del Proyecto Blue Beam? ¿Quién fue Serge Monast? ¿Quiénes fueron sus fuentes de información? ¿Fue asesinado por lo que sabía? ¿Se avecina el Proyecto Blue Beam a la vuelta de la esquina? ¿O la saga Project Blue Beam no es más que uno de los engaños más escandalosos de la era moderna?
No hay duda de que las agencias gubernamentales y militares han trabajado duro para perfeccionar los últimos hologramas, principalmente para usarlos en los campos de batalla. Cuando se trata de la cuestión del Proyecto Blue Beam, puedo resumir mis puntos de vista en cuatro palabras concisas: "¡Dame un respiro!". Una cosa es desarrollar hologramas avanzados para fines militares. Sin embargo, es muy diferente tener todo el planeta y todos en él controlados por sociedades secretas y agencias gubernamentales, y todo en cuestión de semanas, que es lo que sugirió Monast. A medida que nuestras tecnologías se desarrollen, también lo harán nuestros hologramas; eso es casi inevitable. Pero, ¿un Anticristo holográfico y un gobierno mundial, uno que todos aceptemos y no rechacemos en nuestros miles de millones? No te preocupes: es basura. Basura entretenida. Pero, todavía basura.
TraduccionMaEl-BLV
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FUENTEMaEl: 21Enero-2020 Nick Redfern mysteriousuniverse
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