Un paciente ha escrito un relato inquietante de la vida con una enfermedad que le hace pensar que está muerto - y cómo él pasó sus días en los cementerios, ya que era "lo más cerca que podía llegar a la muerte."
El hombre británico, identificado sólo como Graham, despertó hace nueve años totalmente convencido de que ya no estaba vivo a pesar de que aún respiraba.
Los médicos le diagnosticaron el síndrome de Cotard, que también se conoce como "Síndrome de Cadáver que Anda" porque hace que la gente piense que se han convertido en zombies.
Graham no les creyó, sin embargo, insistió en que su cerebro estaba muerto.
La condición inusual surgió después de Graham, que sufría de depresión severa, intentó suicidarse tomando un electrodoméstico con él en el baño.
Los médicos le diagnosticaron el síndrome de Cotard, que también se conoce como "Síndrome de Cadáver que Anda" porque hace que la gente piense que se han convertido en zombies.
Graham no les creyó, sin embargo, insistió en que su cerebro estaba muerto.
La condición inusual surgió después de Graham, que sufría de depresión severa, intentó suicidarse tomando un electrodoméstico con él en el baño.
Ocho meses más tarde, dijo a los médicos que su cerebro había muerto o en el mejor de los casos le faltaba.
Él
perdió el interés en fumar, dejó de hablar y se negó a comer ya que no había
"ningúna razon porque estaba muerto".
Sólo a través de meses de terapia y tratamiento fue capaz de superar la condición y vivir algo parecido a una vida normal.
El síndrome de Cotard es una de las enfermedades más raras en el mundo y se cree que afecta a sólo unos cientos de personas en un momento dado.
Está relacionada con la depresión y viene en una variedad de formas, incluyendo algunos que sienten que sus extremidades ya no funcionan.TraduccionMaEl
Escribiendo en la revista New Scientist, Graham describe cómo los médicos desconcertados le enviaron a los neurólogos Adam Zeman en la Universidad de Exeter y Steven Laureys de la Universidad de Lieja en Bélgica.
En el momento Graham estaba siendo cuidado por su familia porque su enfermedad había empeorado mucho.
Él dijo: "Yo no quería hacer frente a la gente. No tenía sentido.
"Yo no siento placer con nada. Yo solía idolatrar a mi coche, pero no me acerque a el. Todas las cosas que me interesaban se fueron.
"He perdido mi sentido del olfato y mi sentido del gusto. No tenía sentido comer porque estaba muerto. Era una pérdida de tiempo hablar porque nunca he tenido nada que decir."
El punto más bajo fue cuando se vio obligado a ir a su cementerio local porque pensaba que iba a encajar alli.
Sólo a través de meses de terapia y tratamiento fue capaz de superar la condición y vivir algo parecido a una vida normal.
El síndrome de Cotard es una de las enfermedades más raras en el mundo y se cree que afecta a sólo unos cientos de personas en un momento dado.
Está relacionada con la depresión y viene en una variedad de formas, incluyendo algunos que sienten que sus extremidades ya no funcionan.TraduccionMaEl
Escribiendo en la revista New Scientist, Graham describe cómo los médicos desconcertados le enviaron a los neurólogos Adam Zeman en la Universidad de Exeter y Steven Laureys de la Universidad de Lieja en Bélgica.
En el momento Graham estaba siendo cuidado por su familia porque su enfermedad había empeorado mucho.
Él dijo: "Yo no quería hacer frente a la gente. No tenía sentido.
"Yo no siento placer con nada. Yo solía idolatrar a mi coche, pero no me acerque a el. Todas las cosas que me interesaban se fueron.
"He perdido mi sentido del olfato y mi sentido del gusto. No tenía sentido comer porque estaba muerto. Era una pérdida de tiempo hablar porque nunca he tenido nada que decir."
El punto más bajo fue cuando se vio obligado a ir a su cementerio local porque pensaba que iba a encajar alli.
Él
dijo: "Me sentí bien podría permanecer allí fue lo más cerca que podía llegar a
la muerte, la policía venía a por mí, sin embargo, y me llevaba de vuelta a
casa..."
La recuperación de Graham comenzó con las exploraciones que encontraron que los niveles de actividad en partes del cerebro eran tan bajos que estaban más en consonancia con alguien en un estado vegetativo.
Sr. Laureys dijo: "He estado analizando (cerebro) escaners durante 15 años y nunca he visto a nadie que estaba en sus pies, que estaba interactuando con la gente, con un resultado de escaner tan anormal.
"La función del cerebro de Graham se asemeja a la de una persona durante la anestesia o el sueño."
Después de su propio régimen de terapia y drogas, Graham está en el camino de la recuperación.
Él dijo que él no ha vuelto realmente a la normalidad, pero puede salir de la casa por su cuenta y "se siente mucho mejor" de lo que él era.
Él dijo: " No me siento con muerte cerebral más. Las cosas se sienten un poco extrañas a veces..
"No tengo miedo de la muerte, pero eso no tiene que ver con lo que pasó -.. Todos vamos a morir algún día Tengo suerte de estar vivo ahora."TraduccionMaEl
FUENTEMaEl: 27Mayo-2013 TheTelegraph
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